Slow Shopping


Last Friday 20 we read on La Contra of  La Vanguardia an interview with Pier Giorgio Olivetti, a citizen of the slow movement that explained their bet for the continuity of crafts and artisans through citizen involvement. This is the case of the Italian town Abbiategrasso  and more than 150 other towns and cities that join to this philosophy of stopping globalization and homogenization by calming the daily grind. This does not preclude the adoption of new technologies and innovation to enrich processes and approach bidirectionally consumers and producers.

Despite not being able to support on scale economies, slow trade promotes special attention and customer care that generates social value due to proximity and customization. Aspects that compensate their higher price in the market, ensuring the minimal involvement of intermediaries and a fair treatment for the producer’s job and the employees in the process.

Creating spaces for dialogue and exchange of knowledge that contribute to form and to build an enjoyed and conscious lifestyle , we can bet for the transmission of values beyond the simple selling process.

One can escape from the express buying trends by creating shops to delight consumers with having a great and friendly time by a differential brand concept. This may be a highly valid ( and successfully) strategy to not only gain a foothold in the market but to earn the fidelity and the loyalty of our customers and even suppliers.

In this link, you will find a list of some slow international trades through the site slowretail.com.

—-

El pasado viernes 20 leíamos en La Contra de La Vanguardia una entrevista a Pier Giorgio Olivetti, un ciudadano del movimiento slow que hablaba de cómo se había apostado por  la continuidad de oficios y artesanos gracias a la involucración ciudadana. Es el caso del municipio italiano de Abbiategrasso como de otras 150 más ciudades y barrios que se suman a esta filosofía de frenar la globalización y homogeneización calmando el ajetreo cotidiano. Todo ello no impide la incorporación de nuevas tecnologías e innovación para ayudar a enriquecer los procesos y acercar de forma bidireccional al consumidor y al productor.

A pesar de no poder respaldarse tanto en economías de escala, el comercio slow promueve una atención y cuidado del cliente que genera valor social gracias a la proximidad y la personalización. Aspectos que compensan su mayor precio en el mercado, garantizando la mínima participación de intermediarios y el trato justo del trabajo del productor como de los empleados en el proceso.

Creando espacios de diálogo e intercambio de conocimiento que contribuyen a formar y dar cabida a un estilo de vida disfrutado y consciente, podemos apostar por la transmisión de valores más allá del simple proceso de venta.

Uno puede escapar de las tendencias de compra exprés creando comercios en los que deleitar a los consumidores con pasar un rato agradable y amable gracias a un concepto de marca diferencial. Esta puede ser una estrategia muy válida (y exitosa) para no sólo hacerse un hueco en el mercado, sino ganarse la fidelidad y la lealtad de nuestros consumidores e incluso, nuestros proveedores.

En este link, podréis encontrar un listado de algunos comercios slow a nivel internacional gracias al site de slowretail.com .

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s